[La señora de Mota]
Doña María Manrique[1], mujer que fue de Don Manuel Benavides, señor de la Mota, el año de 1488 fundó en Valladolid el convento de Santa Catalina, de religiosas dominicas. A este buen celo y santo propósito hacía contradicción un hijo suyo, y no pudiendo impedirlo de otra manera, tuvo intento de matar a la madre. Habiendo sabido ella tan loca determinación, dejó su lugar y se vino a Valladolid, enderezando su viaje por la villa de San Cebrián de Mazote, y apartó en un convento de monjas que tiene el lugar, que es de la orden de Santo Domingo.
Cuando llegó, estaba la priora haciendo oración a una imagen de un Cristo crucificado, el cual la -369- dijo: Abre la puerta a la señora de la Mota, que viene huyendo de su hijo; y desde entonces quedó el crucifijo con la boca abierta. Este milagro no tiene más testimonio que la tradición tan asentada y recibida de los dos monasterios de San Cebrián y de Santa Catalina de Valladolid, que no es de poca fuerza ni de pequeña fe. Luego que llegó a Valladolid Doña María Manrique, compró las casas en que hoy está el monasterio y situó bastante renta para la sustentación de las religiosas. [2]Las monjas que vinieron eran de la ciudad de Segovia, de la orden de Santo Domingo.
La primera priora fue Doña María Manrique.
De allí a poco les vino breve[3] de la Santidad de Inocencio VIII para que pusiesen en su iglesia el Santísimo Sacramento, y que viviesen las religiosas en la regla del Señor San Agustín, y constituciones del Señor Santo Domingo, y que el gobierno de ellas estuviese a cuenta del convento de San Pablo, y que fuese perpetua priora la dicha Doña María Manrique: todo lo dicho consta del breve original que está en el convento, y todo lo en él contenido se puso en ejecución el año siguiente de 1489. Goza hoy este convento de más de 3000 ducados.
FUENTE
Antolínez de Burgos, Juan, Historia de Valladolid, reedición de J. Ortega y Rubio, Valladolid: Imp. y Librería Nacional y Extranjera de Hijos de Rodríguez, 1887, (De los conventos de Santa Catalina, San Felipe de la Penitencia, de la Aprobación de la Madre de Dios, todos de la orden del Señor Santo Domingo. CAPÍTULO 49), pp. 368-369.
[1] Doña María Manrique, hija del adelantado Gómez Manrique y mujer de Gómez de Benavides (señor de La Mota); Díaz Martín, L. y Reglero de la Fuente, C.M., Poder y sociedad en la Baja Edad Media Hispánica, Secretaria de Publicaciones e Intercambio Editorial, Universidad de Valladolid, 2002 . Volumen 2, p. 730.
[2] Según Juan Agapito Revilla, Las calles de Valladolid: nomenclátor histórico, Valladolid: [s.n.], 1937 (Talleres Tipográficos "Casa Martin") p. 466 este convento lo fundó la hija de Doña María, Doña Elvira de Benavides y Manrique, y no su madre, por la bula de 1488 sobre las casas que habían sido de Don Luis de Velasco, obispo de León.
[3] 3. m. Documento emitido por el papa y redactado en forma menos solemne que las bulas. (Diccionario de la lengua española, RAE).