LA CAMPANA DE SAN PEDRO
Madrid. Iglesia de San Pedro el Viejo
Tradiciones Populares.
La iglesia parroquial de San Pedro es una de las más antiguas de esta Villa. Su fundación se atribuye por algunos a D. Alonso XI, en acción de gracias al Todopoderoso por haber conquistado de los moros las Algeciras[1]. También dicen que coincidió con este acontecimiento el de una singular escaramuza[2] que hubo entre muchachos cristianos con otros, hijos de moros, habitantes en el barrio que aún hoy se llama la Morería vieja.
Cuentan que estos tomaron parte en el combate defendiendo a los suyos, pero que fueron arrollados todos los infieles adultos y párvulos por el arrojo y denuedo[3] de los primeros, que les hicieron retirar fuera de la Villa, y cerraron las puertas impidiéndolos así que tornasen a entrar. Esta puerilidad se asegura contribuyó, por coincidencia, a la fundación de S. Pedro, pero semejante narración queda desmentida con el texto de un privilegio de D. Alonso el sabio, bisabuelo de D. Alonso el XI, en cuyo documento se hace ya memoria de dicha iglesia.
La más notable particularidad de que hacen mención los historiadores, refiriéndose a la antiquísima parroquia de S. Pedro, y acerca de lo cual dice alguno que hay tradición recibida y asentada es la siguiente. Parece que subieron a su torre cierta campana, que no pudo entrar por ninguna de las ventanas, y fue necesario bajarla, para reducirla en refundición a menor tamaño o practicar mayores aberturas a fin de que pudiese colocarse. Dejáronla pues, al pie de la torre, pero con asombro general la hallaron colocada al día siguiente en el sitio en que debía estar. Y era fama que tocando esta campana en tiempo de tempestades cesaban instantáneamente, en términos que algunas veces se oyó decir a los espíritus malignos que las conmovían: ¡huyamos, que toca la campana de S. Pedro!
El Sacristán de esta parroquia disfrutaba de una verdadera canonjía[4], porque los labradores de la jurisdicción de Madrid le gratificaban por el agosto con grande liberalidad, para que cuidase de tocar a nublado, y cuando él iba a recoger las gratificaciones llevaba en el cepillo pintada la prodigiosa campana.
Por los años de 1600 había en la torre de S. Pedro un cuadro en que estaba representada debajo de dos ángeles que la subían, con la siguiente leyenda: con mi voz llamo a los cristianos, espanto a los demonios y desparramo los nublados. Quebrose en 1565 e hicieron de ella dos, que fueron puestas en la misma torre.
Edición. Ana Mª Gómez-Elegido
[1] Algeciras es la primera ciudad fundada por los árabes en su conquista de la península ibérica. La ciudad se convierte en la principal vía de comunicación entre Europa y África, circunstancia esta que marcará toda su historia. Fue definitivamente Alfonso XI de Castilla quien pone cerco a la ciudad andaluza y la conquista tras el ataque en 1339 de Abd-al-Málik, rey de Algeciras y Ronda a territorios cristianos. En 1369 Muhammed V de Granada reconquista Algeciras ? Pero diez años después el rey nazarí comprende que no podrá mantener la plaza mucho tiempo y decide destruirla en 1379 para evitar que vuelva a caer en manos cristianas. En 1462, conquistada Gibraltar, los antiguos términos de las Algeciras pasan a esta ciudad tras haber sido reclamados por Tarifa y Jerez. La ciudad permanece destruida hasta 1704 cuando un grupo de personas huidas de Gibraltar tras la ocupación de las tropas anglo-holandesas aliadas con el archiduque Carlos se asientan en las ruinas de la medina árabe, alrededor de la capilla de San Bernardo que desde entonces se llamaría de Nuestra Señora de Europa.
[2] Riña, disputa o contienda de poca importancia.
[3] Brío, esfuerzo, valor, intrepidez.
[4] Prebenda por la que se pertenece al cabildo de iglesia catedral o colegial.